DECADENCIA DE LA PRESIDENCIA DE QUITO
La
codicia excesiva, la tiranía odiosa y el insolente orgullo que hicieron gala los
españoles con los indígenas conquistados, continuaron con los mestizos
descendientes de ellos mismo y hasta con la nobleza criolla, cuyo máximo delito
consistía precisamente haber nacido en América.
Por
el año de 1780, la situación general para los pueblos que componían la
Presidencia de Quito, era francamente insoportable: la agricultura y la
industria habían decaído, los impuestos se habían aumentado hasta el exceso, el
problema social de los desocupados había surgido con la clausura de muchos
establecimientos fabriles, y el metálico había emigrado y seguía emigrando
inconteniblemente con los envíos frecuentes de rentas para los presidios de
Santa Martha y Cartagena, para los jesuitas desterrados y para el Rey de
España…Y como no se encontraba metálico en ninguna parte, las transacciones
comerciales llegaron hacerse con papas.
0 comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio